Un fin de semana largo es la excusa perfecta para escaparse, relajarse y cambiar la rutina. Pero, si algo puede arruinar esa mini-vacación, es una valija mal pensada. Para evitar cargar con kilos y prendas que no usás, la clave está en armar un guardarropa funcional, versátil y con estilo.
¿Por dónde empezar? La asesora de imagen Verónica Babich aconseja: “Antes de hacer la valija, pensá en el destino y las actividades que vas a hacer. No es lo mismo un viaje a un lugar de clima fresco con paseos al aire libre que una escapada urbana con cenas y eventos más formales”.
Para un viaje corto, Babich recomienda apostar por prendas claves que se puedan combinar entre sí para múltiples looks:
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Blazer estructurado en un color neutro, que eleva cualquier outfit
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Camisas clásicas van con todo y las podés sumar a cualquier look
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Pantalón sastrero o de vestir, cómodo y adaptable
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Vestido midi liso o con estampado discreto, para días o noches especiales
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Jeans oscuros, ideales para paseos relajados
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Cardigan o sweater liviano, para la noche o lugares con aire acondicionado
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Trench o tapado liviano, si el clima lo requiere
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Dos pares de zapatos, por ejemplo, zapatillas cómodas y botines o zapatos cerrados elegantes
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Un conjunto deportivo
La clave está en el mix & match: elegir una paleta de colores coherente y combinar diferentes texturas y cortes para crear outfits variados. Babich sugiere, por ejemplo, usar una camisa blanca con pantalón sastrero, o bien con jeans y debajo de un vestido tipo jumper para un look distinto.
Los accesorios también juegan un papel fundamental para transformar un mismo conjunto según la ocasión:
Marie Kondo recomienda comenzar con una lista de esenciales, cosas que no pueden faltar bajo ningún punto de vista según el lugar, el clima y la cantidad de tiempo que durará el viaje. Luego se los debe categorizar según el tipo de artículo de ropa. Para esto aconseja ponerlos todos a la vista y tener en cuenta cuántas prendas se tiene para cada categoría: pantalones, remeras, camperas, etc.
Para maximizar la efectividad, se pueden empacar atuendos versátiles e intercambiables. Esto facilitará el decidir qué ropa usar durante el viaje y es sumamente importante si se utiliza equipaje de mano. “Empacar algunos atuendos que te encantan también hará que prepararte cada día sea más fácil”, manifestó la experta, y vuelve a hacer hincapié en la felicidad que brindan las prendas.
Un aspecto vital es la manera en la que se doblan (o enrollan) las prendas para guardarlas en la valija. El objetivo siempre es el optimizar el espacio para lograr llevar la cantidad de objetos que se necesitan. Marie Kondo aconseja su propio sistema: doblar la ropa y guardarla en posición vertical en vez de una encima de la otra. Según la experta, esto sirve para reducir las arrugas y poder visibilizar las opciones más fácilmente dentro de la valija.
Con relación a los artículos de higiene en formato líquido, se pueden verter en recipientes más pequeños para que ocupen menos espacio. “Una vez que se han tenido en cuenta los artículos de tocador de tamaño de viaje, lo mejor es usar un neceser impermeable. De esta manera, en caso de que ocurra algún imprevisto, los productos no se derramarán sobre la ropa y su bolso será fácil de limpiar”, explica la experta.
