
Años y años de cocina nos han enseñado que las papas son más ricas según la mayor cantidad de aceite que hayamos usado. Pero, aunque parezca imposible lograr papas doradas y crocantes sin recurrir a ese producto alimenticio líquido, hay una solución infalible que te pasamos a comentar a continuación.
No se trata de usar freidoras de aire (air fryer), el electrodoméstico que revolucionó la cocina saludable y se convirtió en un must para quienes buscan recetas prácticas y sin culpa: es un truquito que consiste en emplear bien ese buen sartén antiadherente que seguramente tenés en tu cocina.
Sin aceite, sin horno y a fuego medio, vas a poder cocinar unas papas crujientes súper sanas e ideales para convertir en snacks o acompañamiento de tus comidas. Seguí atentamente el paso a paso de esta receta que revolucionó las redes sociales y que todos están corriendo a probar:
1- Elegí las papas correctas. Es el primer paso y es fundamental, porque no todas las papas sirven para esto. Lo ideal son las variedades harinosas, como la papa blanca, que al cocinarse quedan más secas y crocantes. Deben ser firmes y uniformes, tanto que puedas dejarlas con cáscara para mayor textura. ¡Lavalas muy bien, para que suelten el almidón, lo que ayuda a que no queden gomosas!
2. Cortalas bien finitas, tanto si las vas a hacer en bastones o en rodajas. Si son demasiado gruesas, no quedan crocantes.
3. Blanqueá por unos minutos. Llevá las papas cortadas a una olla con agua caliente con sal y cocinalas entre 5 y 7 minutos, hasta que estén apenas tiernas. No deben desarmarse: solo ablandarse un poco.
4. Enfriá y secá bien. Retirá las papas del agua, colalas y secalas a conciencia con un paño limpio o papel absorbente. Este paso es elemental, ya que evita que larguen vapor al cocinarlas y garantiza una textura crocante.
5. Calentá la sartén antiadherente, sin usar ni una gota de aceite. Dejala calentar a fuego medio-alto, la clave está en el calor parejo.
6. Cociná en tandas y sin apilar. Es el secreto: no poner una papa sobre la otra. Encargate de distribuirlas en una sola capa, dejando un mínimo espacio entre ellas. Cociná unos minutos por cada lado, hasta que tomen un color dorado y empiecen a ponerse crocantes.
7. Agregá sabor al final. Una vez listas, condimentá con sal fina, pimentón ahumado, orégano seco, pimienta negra o lo que te guste. Servilas rápido, ¡y a disfrutar de las más ricas papas crujientes sin aceite ni horno!